lunes, 26 de enero de 2015
COMARCA DE CALATAYUD
Comarca de Calatayud
En el corazón del Sistema Ibérico, los paisajes de la comarca oscilan entre la dulzura de las vegas fértiles, bien cultivadas y cubiertas de árboles frutales, y la dureza de las parameras inhóspitas, ventosas y frías donde crecen las sabinas.
La vieja herencia árabe se hace patente en el arte mudéjar, del que la comarca ofrece una amplísima colección de obras de arte entre las que se encuentran las que han permitido caracterizar este estilo.
La vieja Comunidad de Aldeas de Calatayud se organizó, en sus inicios medievales, por riberas, agrupando cada una de las riberas a los pueblos situados en la cuenca de un río. Este criterio sigue siendo útil ahora, tanto para describir el territorio como para organizar los recorridos por la comarca.
Su entorno está marcado por el Parque Natural del Monasterio de Piedra, un auténtico laberinto trazado por las cascadas del Río Piedra, junto a cuyo cauce se levantó desde el siglo XIII el cisterciense Monasterio de Piedra.
Destaca el atractivo para el turismo termal de los recientemente remodos balnearios de Jaraba y Alhama de Aragón.
Limita al norte con las comarcas del Aranda y Valdejalón, al este con el Campo de Cariñena y el Campo de Daroca, al sur con las comarcas de la Serranía y del Señorío de Molina-Alto Tajo (en la provincia de Guadalajara) y al oeste la comarca de Tierra de Medinaceli (en la provincia de Soria).
http://www.turismodezaragoza.es/provincia/comarcas/comarca-calatayud.html
miércoles, 21 de enero de 2015
CAMPO DE BELCHITE
Comarca del Campo de Belchite
Calle Mayor de Belchite Viejo |
Iglesia de San Miguel, torre mudéjar del S. Xlll |
Vista de Fuendetodos |
La comarca de Campo de Belchite se extiende desde el piedemonte Ibérico hasta la Plana de María, siendo la cuenca del Río Aguas Vivas la que articula gran parte de su territorio, todo ello propicia una zona de carácter semiárido que encierra parajes de gran atractivo paisajístico.
Tiene una bajísima densidad de población que apenas llega a los 5,5 habitantes por kilómetro cuadrado, dado su dramática pérdida de habitantes a los largo del siglo XX.
El clima mediterráneo continental, de escasas e irregulares precipitaciones y fuertes contrastes de temperatura entre estaciones, junto a la escasez de agua y las heladas tardías condicionan los mediocres rendimientos del suelo.
Lugares con fuerte carga histórica y simbólica nos sorprenden en este territorio, en el que el silencio sereno de las tierras de labor apenas se interrumpe con leves murmullos de agua.
La comarca es famosa por dos hechos, lugar de nacimiento de Francisco de Goya y los dramáticos bombardeos de Belchite en la Guerra Civil Española.
Escenario de asentamientos estables desde la Primera Edad del Hierro, la zona estuvo principalmente habitada por grupos de celtíberos que dejaron constancia de su existencia en las ciudades de Beligion y Belgeda y la cercana Contrebia Belaisca (Botorrita).
Limita al norte con Zaragoza, al oeste con el Campo de Cariñena y el Campo de Daroca, al sur con el Bajo Martín.
http://www.turismodezaragoza.es/provincia/comarcas.html
sábado, 17 de enero de 2015
LOS SANTOS CAPUDOS
LOS SANTOS CAPUDOS
Hoguera de San Antón en Vinaceite.Teruelhttp://www.lacomarca.net/san-anton-san-sebastian/item/1295-el-bajo-martin-honra-a-sus-santos-capudos
En los ciclos anuales
y a las fiestas
, especialmente las del solsticio de invierno, la Navidad,
San Antón y los «santos barbudos», San Blas, la Candelera, Santa Águeda y los
ritos correspondientes (A. Beltrán, San Antón en las fiestas bajoaragonesas;
Colección Boira, 1995), o la específica fiesta de teatro popular en La
Portellada: A. Beltrán, Las tentaciones de San Antonio Abad en La Portellada
(Alcañiz, 1997)
Los “santos capudos”
o barbudos son los santos de invierno, eremitas la mayor parte
Por San Antón se mataba el cerdo engordado por el pueblo con
las sobras y las mondas de las patatas hervidas con algún “puñao de salvao”,
rifado entre la gente. Con el “carrizo” de los panizos se preparan las hogueras
en las distintas plazas del pueblo y la gente visitaba una y otra hoguera al
atardecer.
Por San Blas la cigüeña verás y la hoguera de nuevo vuelve
a llamar a la luz y en San Valero ventolero el aire huele a
longanizas y ternasco asados a las brasas y de postre los roscones protegen de
las enfermedades de la garganta, al igual que santa Águeda, a quien le cortaron
los pechos.
Así los fríos inviernos de Aragón irán viendo crecer los
días esperando las lluvias de primavera para que crezca la sementera.
|
viernes, 16 de enero de 2015
LA FRANQUEZA (VALORES ARAGONESES lV)
LA FRANQUEZA
Creemos que no merece otro título ‘que el de una enérgíca llaneza. Sea de esto lo que
quiera, y ora se atribuya á virtud , ora .a defecto, la franqueza
de los aragoneses es un hecho indisputable. ‘Allí
se aborrece el disimulo por la falsedad y el
artificio que le son-¡nneherentes: la adulaciou, la
lisonja, los falsos miramientos, la circunspeccion artificiosa, no son fruta
del pais: si la educacion modifica en algunos la demasiada dureza que lleva
consigo , no por
eso llega á ejercer tal influencia que le haga desaparecer.
la franqueza
de los aragoneses . y su audacia para decir en buen romance cuanto les
ocurre ,de “El modo auténtico desde aquella
célebre y sabia
fórmula que tenia lugar en la coronacion de sus reyes: »
"Nos: que valemos tanto
como vos ,y que juntos podemos » mas que vos , os hacemos rey si nos
gobernu’bien,bien”; - si
no, no".
Los electores se consideraban Iguales a sus reyes cada uno de por
si, y superiores estando juntos ó colectivamente; y asi como lo sentían se ‘lo. decían“ hablan sin rodeos de ninguna especie: la condicion
con que les reconocian por monarcas tampoco podía ser mas explícita, franca y paladina.
Dignidad
existe en la conducta que los esposos observan con sus mujeres: el marido
aragonés es generalmente poco afectivo, pero trata a’ su compañera con
miramiento; y siendo bastante general en otras provincias el bárbaro correctivo
del palo, no solo es raro en Aragon ver un esposo golpear a su consorte, sino
que si alguna vez sucede, un sentimiento general de indignacion brota del
corazon de todos sus paisanos, los cuales se declaran sin titubear por la parte
débil , y señalan con el dedo y con aire de desprecio al que se degrada hasta
el punto de atacar ti quien no puede resistir. Dignidad es en nuestro concepto
hacer uso de la fuerza buscando al inerte , y desdeñándose de provocar al débil
ó apocado.
Es, pues, el orgullo casi siempre noble , el fondo
principal de su caracter, la cualidad primitiva ú originaria de que parten y á
la cual pueden referirse todas las demas. ¿Cuánta altivez no revela el nos que
valemos tanto como vos , y que juntos Podemos mas que vos ?
https://books.google.es/books?idhttps://books.google.es/books?id=RJc5AQAAMAAJ&pg=PA252&lpg=PA252&dq=franqueza+aragonesa&source
Semanario pintoresco español: Lectura de las familias. Enciclopedia popular.
Por contra, el aragonés reprueba a quien no "da la cara" al quien huye de sus responsabilidades y deberes o miente. Expresiones como : "ser un zaino", "un mego-a" "zurzir por detrás" "chinchar", "ser un-a chinche""tirar la piedra y esconder la mano", son contrarias a la franqueza y a la nobleza.
.LA FRANQUEZA ( VALORES ARAGONESES lll)
LA FRANQUEZA
Don Francisco Gregorio de Salas,
bosquejó el carác ter aragonés con tanta naturalidad y llaneza como falta de
animacion y poesía , en la siguiente décima.
¡El aragonés osado
Todas las cosas emprende
Con tesón, y las defiende
Con tesón, y las defiende
Con espíritu arrestado:
Testarudo y porfiado
Testarudo y porfiado
A nadie cede su gloria,
Y para formar su historia
Jamas perdona fatiga;
Yaspíra siempre d la intriga,
Al dominio y la memoria.»
Jamas perdona fatiga;
Yaspíra siempre d la intriga,
Al dominio y la memoria.»
Acordes con la verdad de este cuadro en general, no lo
estamos repecto á la intriga que Salas nos atribuye, y por eso hemos copiado en
bastardilla el penúltimo verso de la décima; pero
de esto hablaremos despues.
Lo primero que llama la atencion
del que observa por primera vez a’ los aragoneses, es ese aspecto de austeridad y aun de fiereza, que forma, digámoslo así, la corteza exterior de su
carácter.
No hay que buscar en ellos ni
zalameria en la conversacion, ni delicadeza en las maneras, ni suavidad y
dulzura en las costumbres: su exterior grave, y si se quiere, adusto y dcsabrido,
anuncia desde luego un temple de alma particular á que nosotros, .’a falta de
otro nombre, hemos dado el de austeridad y de fiereza; pero una fiereza que no
está reñida con la dignidad , y una austeridad igualmente distante de la
barbarie que del extremado refinamiento de las costumbres. El aragonés es un
medio entre el hombre de la naturaleza y el hijo mimado de la cultura y
civilizacion moderna.
Esa rigidez, esa austeridad y
dureza de que hablamos, sube todavía de punto si se atiende a su conversacion y
a sus hechos. Enemigos de la palabreria , acostumbran a hablar poco, pero
cuando una vez sueltan la lengua, no se detienen en manifestar de pe a pa todo
cuanto les ocurre , aunque sea a costa de ofender a’ la persona á quien se
dirigen; ni dejan de decir lo que sienten con la mayor lisura y llaneza, y del
modo mas esplícito y paladino , desechando toda
especie de consideracion y de rebozo, cualquiera que sea el asunto de que se
trate. La franqueza es uno de los rasgos mas
característicos del pue blo aragonés: un deudor
citado á juicio no niega la deuda que el acreedor le demanda, aun sin documento
en que hacerla constar; dice que no ha podido pagarle , y a’ eso se reduce toda
su contestacion: cn los resentimientos particulares, el que se cree ofendido
tiene buen cuidado de anunciar al ofensor las terribles consecuencias de su enojo ni trata de disimular su cólera. Esa franqueza
es, como hemos dicho, trascendental .’¡ su conversacion: las palabras
están en armonía con lo que interiormente sienten , y aun por eso se dice de
los aragoneses que ni tienen pelos en la lengua, ni se detienen en decir un
descaro al hijo del sol.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)